Este cuento surgió de la zona de comentarios del cuento La sopa de piedras de Martes de Cuento y forma para de la colección Pudo haber sido así.
Ahora, el blog de Martes es un blog premiado y todo. Pero su origen fue tan humilde como el mío o como el tuyo y sus primeros cuentos no estaban tan comentados como lo están ahora.
Imagen vía Pinterest
Hoy te voy a contar un cuento muy especial en el que te voy a detallar como crear un cuento a base de comentarios desde sus orígenes.
Cultivar comentarios
Los comentarios no surgen así como así. Además de cuidar con todo esmero el post o cuento, tienes que adornarlo con todo tipo de detalles a su alrededor. Contar quién eres, cómo surgió el blog, a qué comunidad perteneces,… Todo esto lo puedes ir ubicando en el menú superior y la barra lateral.
Y lo más importante: Una vez que ha nacido un comentario en tu blog, tienes que atenderlo como se merece. No conviene que pase más de un día entre que te comentan y respondes. Si prevés que te va a ser difícil cumplir con esto, debes comunicarlo con la mayor precisión posible en algún lugar visible del blog.
Recoger comentarios
Puede que al principio, tengas tan pocos comentarios que difícilmente puedas cocinar una sopa como tal. En ese caso, recurre a blogs amigos con lo que tengas confianza y recoge comentarios que estén ya más elaborados; pero ten una exquisita cortesía en su utilización y deja la referencia de forma discreta.
Generalmente, clicando en la fecha del comentario te suele aparecer su URL que te puede servir perfectamente como referencia.
Lo mismo puedes hacer con los comentarios más elaborados de tu blog.
Cocinar comentarios
Si has seguido con todo detalle los apartados anteriores, ya puedes contar con los mejores ingredientes para elaborar una sopa de comentarios (no olvides tener siempre a mano la URL de cada comentario o una referencia similar).
Al igual que en el cuento de La sopa de piedras, los comentaristas te van a traer o ya te han traído lo que tú les has pedido. Ahora solo es cuestión de ir echando poco a poco y por su orden de cocción (los comentarios más duros al principio y los más blandos al final) los distintos ingredientes.
Se añade un poco de sal e imaginación al gusto como hace la señora del vídeo y ya puedes ofrecer una sopa de comentarios a tus amables lectores y comentaristas. Ten en cuenta que los cuentos no son más que una sopa de letras muy bien elaborada.
Vídeo vía Cocina al Natural
Invitar a comentar
Algo que se suele olvidar a menudo es invitar a comentar cuando has acabado un cuento y dejas a tu potencial comentarista sin saber qué hacer. Una frase de cortesía y un par de preguntas relacionadas con el cuento es más que suficiente para que alguien se anime con el primer comentario.
Ten en cuenta que cuando alguien ve la zona de comentarios de un cuento vacía, se pregunta si no habrá algo raro para que un cuento tan bonito no tenga todavía ningún comentario.
Así que si has tenido la amabilidad de leer hasta aquí, te agradecería un pequeño esfuerzo más y déjame tu comentario. Lo atenderé con el más exquisito cuidado y puede que otro día aparezca en alguna sopa de comentarios de este blog.
Cuatro Vientos 
Hola, Ratoner.
Yo siempre había comentado blogs pero no me parecía cortés dejar mi enlace. Me parecía un poco como obligar al personal. Por motivos luneros, mi cuenta es como una constelación sin descubrir y no podían llegar a mi ubicación. Algo he avanzado en ello.
Hay que ser paciente y todo llega. A veces no damos la importancia necesaria a un comentario pero es tanto o más que una buena entrada. También es un trabajo importante y requiere tiempo. No puedes dejar cualquier cosa por el mero hecho de «cumplir» y salir del paso. Eso te lo puedes permitir en escasas ocasiones. Tampoco es cuestión de describir una tesis pero si le pones un poquito de interés, lo aderezas con algo de cariño y dejas en él tu impronta personal… Algo ya tienes hecho.
Así que mi impronta son mis Qamarbesis 🙂
Feliz día y sopla, no te quemes los besos con la sopa.
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Qamar, gracias por tu comentario. Lo cuidaré como se merece y espero que, en un futuro próximo, pueda hacer referencia a él en otro cuento.
Interés, cariño e imaginación son los mejores ingredientes que debe tener un buen comentario. Siempre tiene que dar la sensación de que hay algo más detrás de las cuatro letras (no tiene que ser muy extenso) con que agradeces al autor el esfuerzo de publicar el post o cuento.
Ese algo más que hay detrás ya se puede desarrollar con más detalles a través de un mensaje privado. Despacito y con buena letra, se entiende.
Esos detalles, vamos a desarrollarlos a través de un Taller de Comentarios. Pero esa es ya otra historia…
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Señor cocinero comentarista, muchas felicidades por su guiso: cuidado, bien elaborado y muy, pero que muy sabroso.
Tal y como muy bien dices, los principios pueden ser un tanto «hambrientos», pero a medida que las entradas van haciendo chup-chup, los comentarios también van endulzándose y llega un día en que están ya listos para degustar despacito. Vienen a ser el postre más dulce del mundo en la cocina del blog. Se esperan con ganas, como colofón de una buena comida. ¡Buen provecho! 😉
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Martes, aunque no has dicho exactamente eso, me has hecho pensar en los comentarios chup-chup.
Como si fueran esas pastillas de sopicaldo que le dan gusto al resto del guiso. Le daré un par de vueltas a ese tipo de comentarios.
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😀 supongo que ese chup-chup es el cariño, que realza los comentarios 🙂 Un abrazo, ratón.
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El cariño o el afecto, según la confianza que tengamos con la otra persona, es fundamental en un comentario. Y aunque no es lo mismo que decirlo a la cara, se acaba notando. Un abrazo, bicho que todo lo lee.
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Sin duda se nota, es como sonreír al contestar por teléfono, ¡vaya si se nota! 😉
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