Qamar y Ratoner

Después del cuento del ratón cuántico, el ratoncito estaba sumido en una profunda perplejidad.

Qamar

– Tengo que contarle esto a Qamar para ver qué me dice.

Así que pensó muy fuerte, muy fuerte en ella y apareció en su mente. Entonces, le contó lo ocurrido en el cuento anterior.

– Es algo que te quería contar hace tiempo -le respondió Qamar-. Tenía miedo de que no lo entendieras como parece que ha ocurrido. Pero ya que lo sabes, intentaré explicártelo lo mejor posible.

Empezó a contar: Tú eras un ratoncito bloguero normal. Pero un día me dijiste que querías ser azul como yo. No se me ocurrió otra cosa que llevarte a través de un agujero de ratón a las Galaxias de los Ratones para hacer el cambio.

El viaje de ida fue bien -prosiguió-. Pero el viaje de vuelta a Isla Imaginada fue múltiple.

– ¿Qué quiere decir viaje múltiple? -preguntó asombrado el ratoncito-.

– Por decirlo de forma sencilla: se fue un ratón y volvieron varios.

Algo de eso se temía el roedor por todo lo acontecido últimamente en la Isla. Entonces se preguntó cómo podría saber quién era en cada momento.

– Es muy sencillo -le aclaró Qamar-. Cada habitante de la Isla, te llama de una manera distinta. Yo, por ejemplo, te llamo Ratoner (con r final como la de Qamar). Solo tienes que estar atento durante las conversaciones.

Se despidió de Qamar y empezó a darle vueltas sobre cómo se iba a poder organizar a partir de ahora. Cuando, de repente.

Erika Martín

– Hola, ¿quién eres?

– Soy Erika, una maga asistente.

– ¿Qué es una maga asistente?

– Es como una secretaria, pero hace más cosas.

– ¿Sabes el lío en el que ando metido?

– Sí. He leído la parte de arriba de este cuento y el cuento del ratón cuántico.

– ¿Y qué me aconsejas?

Erika le comentó que lo estaba organizando bien hasta ahora. Por ejemplo, los cuentos en que los que aparece Qamar están en la colección Luna ratuna.

– Erika, ¿y cuando salgas tú?

– Querido ratoncito, esa es ya otra historia…

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